El SPM (Síndrome Pre Menstrual) es un concepto tan vago y antiguo que nadie sabe bien en que consiste; algunos dicen que hasta es una enfermedad que expresa sus síntomas en el cuerpo y la psiquis femenina.
Yo no se exactamente de qué se trata, incluso dudo de que realmente exista. En el fondo pienso que es solo un conjunto de mitos oscuros, llevados de generación en generación, que cada vez se diluyen más por tener cada vez menos asidero racional (como cuando tu abuela te dice que en “esos días” no podés lavarte la cabeza).
Prueba de lo que digo es que - a pesar de existir en el mundo laboral - en los últimos 15 o 20 años nunca, pero nunca, ví mujer alguna que haya faltado al trabajo por usar el llamado “día femenino”. Si lo pensamos 2 segundos, es un permiso totalmente ridículo. Nadie deja de trabajar por esa razón y a ninguna profesional con dos dedos de frente se le ocurriría tomarse semejante licencia. Si avanzamos un poco, es hasta injusto e irracional: por el día femenino se puede faltar sin presentar un certificado médico, pero el comprobante es indispensable después de sacarte 4 muelas.
En fin, oscuro e indescifrable, el SPM continúa para algunos teniendo tantas variantes e involucrando tantas conductas que llegamos a un punto en el que una mujer no puede simplemente sentirse mal, tener dolor de panza, estar de mal humor o un poco nerviosa porque, ineludiblemente, pasará a ser catalogada como aquella “histérica” a la que seguramente “le está por venir”.
O al menos así lo piensa Anaflex, con este comercial que me dejo boquiabierta.
El día en que vea a cualquier mujer tener alguna de estas reacciones, llamaré a la policía o al manicomio, porque seguramente tendrá algo mucho mucho más grave que un simple SPM…. Lo que sea que fuere, el SPM nunca será justificación para que las mujeres se comporten como maniáticas, ridículas, desmesuradas e irracionales una vez al mes. Las conductas que describe Anaflex son degradantes. Insultan al género haciéndonos sujetos pasivos de una especie de locura sexista que nos lleva a actuar como insanas de la noche a la mañana.
Por lo demás, Anaflex es un simple analgésico, que siempre podrá calmar un dolor físico, pero ningún dolor físico, por fuerte que sea, perturba tanto a las personas.
Llego a 3 conclusiones posibles:
1.- El supuesto SPM es solo un malestar uterino que se cura con analgésicos, libre de locuras y actos inimputables; o
2.- Anaflex es solo un analgésico y como tal no sirve para aliviar el místico SPM; o bien
3.- Anaflex no es un análgesico sino un bálsamo mágico que cura dementes.
Me quedo con la estupidez del “Si Miguel!”, al menos por tonta hace reír.